jueves, abril 25

DÍA DEL BARRIO DE BALVANERA

El barrio de Balvanera está comprendido por las calles Av. Córdoba, Av. Callao, Av. Entre Ríos, Av. Independencia, Sánchez de Loria, Sánchez de Bustamante, Av. Díaz Vélez y Gallo. Limita con los barrios de Recoleta al norte, San Nicolás y Monserrat al este, San Cristóbal al sur, y Almagro al oeste. La superficie total del mismo cubre, según su última delimitación, 262 manzanas con una superficie de espacios verdes de 39.043 metros cuadrados.

El nombre oficial, Balvanera, proviene de la parroquia de Nuestra Señora de Balvanera, construida en 1831.

Durante el siglo XIX, la parroquia de Balvanera era considerada un suburbio de Buenos Aires. Un censo de 1836 estimaba su población en 3.625 habitantes. Por entonces esa zona era conocida como las quintas, debido a que la mayoría de esos habitantes vivían en pequeñas fincas. La avenida que recorría el barrio hacia el oeste era el Camino Real, actualmente Rivadavia. A mediados de siglo se convirtió en cabecera del ferrocarril del oeste.

Balvanera tenía una fuerte tradición política que identificaba al barrio con el caudillo Adolfo Alsina, y luego con los líderes de la Unión Cívica Radical (UCR), Leandro Alem e Hipólito Yrigoyen. Esasí, como hacia 1900 se asociaba a Balvanera con las violentas protestas electorales.

Una de las caractéristicas más entrañables del barrio fue adquirida con los burdeles de Junín y Lavalle, zona en la que según Jorge Luis Borges, el tango adquirió sus matices eróticos más notorios. El crecimiento natural y el desarrollo del ferrocarril consiguieron por esa época que el barrio empezara a ser parte de la ciudad.

Durante los dos primeros decenios del siglo XX, la zona en torno a la avenida Corrientes fue elegida como núcleo de la comunidad judía de Buenos Aires, habiendo en este barrio sinagogas y clubes judíos como el Hebraica, y también se concentró en ella el comercio textil, lo que a su vez atrajo a grupos de las comunidades árabe y armenia. La zona del mercado mayorista de frutos y verduras (el Abasto) mostraba una activa mezcla de italianos y criollos. Pese a esta dominante presencia de inmigrantes, Balvanera,  no apagó su fama como barrio de guapos (cuchilleros), de milongas (lugares de baile) y tango.

A esta zona se la denominó Once. Este nombre surge a partir del apelativo con el que se conoce la  Estación de Ferrocarril Once de Septiembre, situado frente a la Plaza Miserere donde descansan los restos de Bernardino Rivadavia.  En Once se construyeron algunos centros de instituciones judías, incluyendo el de la comunidad AMIA, destruida por una bomba el 18 de julio de 1994, durante un ataque terrorista, nunca esclarecido. También en esa  zona, sobre la calle  calle Boulogne-sur-Mer, se encuentra también  el teatro Yiddish IFT.

A finales del siglo XX, las comunidades chinas y coreanas  se incorporarán también a la zona de Once, encarando diverso tipo de actividades comerciales. La zona sur de Balvanera acoge a muchas instituciones de la comunidad gallega, y se distingue por su animado comercio del mueble en torno a la avenida Belgrano. La comunidad árabe tiene a su vez tiendas y sedes de instituciones en el extremo sur de Congreso, cerca de San Cristóbal.

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